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miércoles, 4 de junio de 2014
sábado, 3 de noviembre de 2012
Apuntes sobre la coyuntura política de Jujuy y las tareas de la izquierda revolucionaria.
Posteamos en este caso a los compañeros del PTS de Jujuy y estos apuntes sobre la situación política en esa provincia.
Por Gaston Ramírez
Desde
el lanzamiento electoral de la Tupac Amaru , a “cancha llena” junto a
los funcionarios de la colisión kirchnerista, “Unidos y Organizados”, se
agitó todo el arco de los partidos patronales. El primer grito lo pegó,
“Don” Gerardo Morales, que al “tin tin” de su cacerola, volvió a
exigirle a Fellner “orden en las calles”. El gobierno no se tardó, y
ordenó una feroz represión, el mismo día en que el PJ festejaba la
lealtad al peronismo. Nada más contrario aquella gesta histórica que
supieron dar miles de trabajadores y pobres urbanos contra la
proscripción del régimen infame. En
el Barrio Malvinas fueron 16 hs de “palos y balas” de la policía, más
de 100 los detenidos y decenas los vecinos heridos por oponerse a las
instalaciones de la empresa de energía EJESA que causa terribles daños a
la salud. Al otro día, el gobierno ratificó la represión y lanzó un
grito de guerra a todos los vecinos que calificó de “inadaptados”. Hace
dos meses, en el suplemento N°2 de LVO – Jujuy, advertíamos que “Fellner
avanza en la judicialización de los que lucha. La UCR la pide”. A decir
verdad, nos quedamos cortos…
Pero
aquellos que más bien, se mostraban preocupados por los “costos
electorales” para el PJ que le puede implicar la Tupac , fueron
superados por los mismos acontecimientos, que irrumpieron en un supuesto
apacible escenario pre electoral hacia el 2013. Por un lado, la brutal
represión policial; y por el otro, la firme decisión de resistir de
cientos de jóvenes, mujeres y trabajadores de Malvinas que pusieron el
cuerpo en las calles cansados de los atropellos y el desprecio por sus
vidas de las empresas y el gobierno.
El gobierno K en Jujuy asume el mandato de orden y represión contra los que luchan
La
mano dura de Fellner, sorprende a algunos que venían acostumbrados a
sus mandatos anteriores donde privilegió el diálogo y el consenso,
(aunque cuando tuvo que reprimir no dudo en hacerlo y su policía mató en
2003 a los compañeros Cuellar e Ibañez en Ledesma). Veamos un breve
repaso de sus mandatos: durante el primero junto al alicaído menemismo
asumió como piloto de tormentas conteniendo a los desocupados con
planes. Luego devenido duhaldista acompañó la devaluación del salario y
esperó la llegada de Kirchner, para asumir como uno de sus brazos
derechos, llegando a ser el jefe de la Cámara de Diputados
durante su gobierno y el primero de Cristina. Ahora, en su tercer
mandato, se ajusta a las exigencias del momento. Ante las tendencias al
agotamiento del modelo K y el “fin del nunca menos”, pretende mediante
la represión y el hostigamiento de la Justicia , poner un freno a las
aspiraciones y a la acción directa de los sectores más postergados y que
menos se beneficiaron durante los años de fuerte crecimiento económico.
Estos sectores en la provincia son enormes, más del 50% tiene empleo
precario y son miles los desocupados que viven de changas y
73 mil los que tienen problemas de vivienda. El casi nulo avance del
tan anunciado plan “un lote para cada jujeño que lo necesite”, junto a
las amenazas de judicializar a todos aquellos que tomen tierras, es un
claro ejemplo de concesiones y más de cómo se van terminado los tiempos
promesas del FPV jujeño. Pero también de cómo el gobierno pasa a
utilizar, cada vez más, el aparato de Estado para imponer su voluntad a
favor de grandes empresas como EJESA, las mineras o grandes
terratenientes, como sucedió el año pasado cuando la policía mató a tres
jóvenes trabajadores -Ariel, Felix y Juan- solidarios con los sin
techo, para defender la propiedad del empresario genocida Blaquier.
El relato “progresista” que nunca asumió
Así,
lejos parece quedar el discurso de derechos humanos que desde Nación y
La Cámpora , pretendían que asuma el gobierno provincial hace unos meses
cuando iniciaron los juicios contra los genocidas. Nuestras
advertencias a muchos que se mostraban optimistas, luego del retraso por
años de los juicios, no eran solo por los vínculos estrechos entre
genocidas como Blaquier. Es savido que Fellner junto a funcionarios del
gobierno como el ex Secretario de Turismo y Cultura, Nocetti, que fueron
parte de los asesores legales de la empresa. Ni hablar por la defensa
de Fellner al ex gobernador Barrionuevo que ordenó la represión del año
pasado en Ledesma para salvar las tierras del ingenio. Sino tambien,
porque con el objetivo
de contener y desviar el proceso abierto con la rebelión de 2011, como
planteamos en el reciente número 28 de la revista “Estrategia
Internacional”:“… el kirchnerismo desarrolla un “poder formal” por
arriba, con un relato progresista “nacional y popular”, pro derechos
humanos y a favor de los trabajadores y el pueblo, pero basado en un
“poder real” conformado por los “barones” del peronismo (intendentes y
gobernadores), la burocracia sindical y las policías bravas, como la
Bonaerese como “modelo”.”
El Gobierno, la Tupac y el régimen de dominio
En
este marco el lanzamiento de la Tupac abre toda una serie de
interrogantes electorales. Por un lado, en un escenario de relativa
calma de la economía, y cuando el cristinismo no tiene garantizada la
sucesión, aparece la especulación sobre el caudal de votos en disputa y
los espacios de poder entre el Fellnerismo y otras alas del PJ como la
del vice gobernador, Jenefes, y como arreglarían con la Tupac hacia el
2013. El peso y la fuerza de las más de 50 mil personas organizadas a
través de la asistencia del Estado Nacional mediante las cooperativas de
vivienda, planes sociales, escuelas, colegios, hospitales, fábricas
textiles, etc. le permite a los dirigentes de la Tupac tener un fuerte
poder propio para disputar “mano a mano” espacios de poder, cargos,
legisladores, concejales, etc. y abrirse paso frente al PJ y concertar
alianzas electorales. De todo esto, teje y maneje, no podemos descartar
duras fricciones y hasta episodios de ajustes de cuentas como
acostumbran.
Pero
por fuera del mero cálculo de los votos, la entrada al sistema
electoral de la Tupac implica un cambio importante entre en su relación
con el Estado. El presupuesto millonario que todos los meses gira la
Nación a esta organización, ya definimos, no es por su denodado
oficialismo; en realidad, es al revés. Su adhesión al kirchnerismo es el
resultado del financiamiento público. Esta decisión de los K, fue
tomada como parte de los mecanismos de contención de miles de pobres y
desocupados a través de un proyecto asistencialista a escala que
tuvieron que implementar para desviar la lucha por el trabajo genuino y
por demandas democráticas elementales
como la vivienda, la salud y la educación. A la vez, que su dirección
jugó a desgastar, cooptar, expropiar y llegó hasta amedrentar a todos
aquellos que luchaban cuestionando los sueldos miserables del gobierno,
como fueron los docentes y múltiples reclamos en los barrios pobres. Un
importante despliegue a modo de bombero para apaciguar la lucha de
clases, lo jugó la Tupac , y en Ledesma actuando junto a la CCC , para
desactivar las tomas de tierras a la espera del plan del gobierno a
cambio del manejo de tierras y cooperativas.
De
esta manera, establecieron en los hechos un régimen de gobierno fundado
en un pacto entre el PJ y la Tupac , aunque en más de una oportunidad
tuvieron roces propios del poder y seguramente los sigan teniendo. Un
acuerdo en el cual, la UCR de Morales, entró como socia menor del PJ,
quedando luego al mando de la ciudad de San Salvador, a cambio de actuar
como una oposición “responsable”. Sólo así de conjunto pudieron
garantizar los negocios capitalistas en la provincia posteriormente al
2001 y que los empresarios amasen fortunas durante los años de la
recuperación económica.
La
presentación electoral de la Tupac tiende a integrar aún más a esta
organización al Estado, reforzando los mecanismos de control y
contención de sus bases, apelando a formas democráticas como es la
posibilidad de contar con candidatos propios, aunque en sus propias
bases sea muy resistido el manejo verticalista de la dirección. Es así
que el régimen de hecho montado por los K en Jujuy, más allá de las
tensiones entre la Tupac, Feller y Morales, con la Tupac totalmente
integrada como “pata izquierda” del régimen bonapartista conservador de
Fellner y
Jenefes, va a intentar perfeccionar los mecanismos de control y desvío
de la lucha de clases de los más desposeídos. Aunque, esta maniobra de
la Tupac, se da hacia el fin del modelo y cuando sectores populares
pierden las expectativas y comienzan a emerger a la acción directa,
superando muchas veces a las mediaciones reformistas como sucedió en la
toma de tierras o en otros casos directamente rechazando su presencia
como sucedió con los vecinos de Malvinas frente a la Tupac.
Los límites de la mano dura y la contención frente al emerger obrero y popular
El
intento de Fellner de constituir un gobierno de orden, más
“clásicamente feudal” como los de muchas provincias del interior, choca
con las aspiraciones de amplios sectores del pueblo trabajador que ven
en su acción directa, la única, manera de resolver reclamos como el de
vivienda, salud, educación o la cuestión ambiental en los barrios. Pero
también, los límites a la mano dura están en los sectores ocupados, como
vimos en Salta con la crisis política que se le abrió al gobernador Urtubey
luego de la brutal represión sobre los azucareros de El Tabacal. En los
ingenios de Jujuy la mano dura difícilmente sea aceptada sin
resistencia, porque nos encontramos con un fuerte espíritu combativo y
antiburocrático que se expresa en el
despertar de los obreros, las mujeres y familias, tal como vimos en la
huelga de 16 días en La Esperanza, y posteriormente en la recuperación
del sindicato, contra el intento de la patronal que contó con el aval de
Fellner para que vuelva la burocracia. Pero es en los cientos de
jóvenes y mujeres precarizados, cansados de la prepotencia, los aprietes
y la discriminación de la policía de todos los días en los barrios
donde se encuentran enormes reservas de combatividad. No es casual, que
son quienes vienen jugando un rol de vanguardia en los enfrentamientos
con la policía, por eso, la mayoría de los detenidos y lamentablemente,
muertos, son menores de 30 años. Estos sectores, también expresan un
rechazo a toda forma de regimentación y control clientelar, por eso, el
plan de la Tupac de desviar cada lucha que “se
les va de las manos” al regimen y contener a traves de cierta
espectativa electoral hacia sus candidatos electorales.
Organizar ampliamente la bronca y la combatividad de los de abajo contra el gobierno
En
las acciones y luchas de los más postergados como en el despertar de
los azucareros se expresan tendencias profundas que muestran la
potencialidad del pueblo trabajador para hacer frente a los gobiernos
que reprimen al servicio de los empresarios. De aquí, que una de las
tareas de primer orden de la izquierda es preparar un trabajo paciente y
sistemático en las organizaciones obreras y estudiantiles que permita
ganar fuerza a través de campañas y movimientos amplios de jóvenes y
trabajadores contra la represión, la precarización laboral, los derechos
de las mujeres trabajadoras y por la cárcel a Blaquier y todos los
genocidas, desplegando amplias banderas democráticas y por los derechos
de los trabajadores. Las recientes elecciones en
la Facultad de Humanidades por fuera de todo el clientelismo del PJ,
muestran que también existe un sector de alrededor de 300 estudiantes
que votan a la izquierda, que va desde la izquierda reformista-populista
hasta la izquierda trotskista del PTS. El año pasado fueron casi 10 mil
los votos en toda la provincia para el Frente de Izquierda que presentó
la única alternativa independiente y de lucha contra el gobierno y los
patronales. Desde allí contamos con un punto de apoyo para desplegar la
organización democrática y de bases de decenas de jóvenes que se
preparen para confluir con los trabajadores y sectores populares,
mostrando así, una alternativa política y de lucha en las calles que
entusiasme a cientos y miles. Si se puede. Desde los sectores de
vanguardia de la clase trabajadora y la juventud, levantando un programa
de exigencia a las directivas gremiales que le dan
tregua al gobierno o aquellas que sólo levantan demandas para sus
afiliados, para que articulen el frente único, y un programa que de
respuestas a todos los reclamos obreros y populares, ganando base en los
barrios, para enfrentar al gobierno y a las patronales. El PTS y su
juventud en el NOA se proponen encarar este desafío con todas sus
fuerzas.
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martes, 23 de octubre de 2012
La estética del silencio. A propósito de una nota en La Gaceta
Resposteamos al compañero Juan Rovere de Tucumán y esta muy buena denuncia al falso escándalo que causan las pintadas de la Juventud del PTS en la Facultad de Derecho de la Universidad de San Miguel. El post original acá
por Juan Rovere
El periodista del diario La Gaceta, Roberto Delgado, escribió en su columna de opinión una nota crítica acerca de los grafitis que realizó la Juventud del PTS durante la marcha por el segundo aniversario del asesinato del joven militante del Partido Obrero, Mariano Ferreyra. Según Delgado, las blancas paredes inauguradas hace 15 días abrían sido pintarrajeadas, arruinadas, en lugares ajenos (pero que nos representan a todos). ¿Nos representan a todos?
El concepto estético del periodista pareciera ser tan conservador como el de las propias autoridades de la Facultad de Derecho. En última instancia lo que defiende es una supuesta pureza que debería tener la fachada de la Facultad de Derecho. Todo un mensaje. Justamente una institución como la Universidad, que debiera expresarse hasta por los poros, se pretende acallarla, silenciarla, casi una blanquización de los cerebros. ¡Ninguna Idea! ¡Ningún color!
Sin embargo, no deja de sorprender el criterio estético de nuestro crítico. Para él un grafiti en las paredes es lo suficientemente antiestético como para escribir una nota de opinión. Sin embargo, la presencia del genocida Goane, vocal de la Corte Suprema provincial y docente de esa “pura” facultad no le genera ningún “dilema de conciencia”. El silencio de las páginas de La Gaceta frente a la marcha exigiendo justicia por Mariano Ferreira, los casos de gatillo fácil, las constantes amenazas y aprietes a los sin techo, pareciera ser muy estético, no le genera ningún escozor y debe ser mejor que quede “en blanco”.
“Esto volverá a ocurrir”
Sin embargo, no deja de sorprender el criterio estético de nuestro crítico. Para él un grafiti en las paredes es lo suficientemente antiestético como para escribir una nota de opinión. Sin embargo, la presencia del genocida Goane, vocal de la Corte Suprema provincial y docente de esa “pura” facultad no le genera ningún “dilema de conciencia”. El silencio de las páginas de La Gaceta frente a la marcha exigiendo justicia por Mariano Ferreira, los casos de gatillo fácil, las constantes amenazas y aprietes a los sin techo, pareciera ser muy estético, no le genera ningún escozor y debe ser mejor que quede “en blanco”.
“Esto volverá a ocurrir”
Lamentándose sobre la posibilidad de que nuevos grafitis irrumpan la ciudad, pareciera que el columnista realiza un llamado al “orden” y al respeto por el silencio de las paredes. Ignora Delgado (¿ignora?), que el método grafiti es cada vez más extendido en todo el mundo como expresión artística y cultural, pero también como forma de expresarse de los sectores populares y la juventud, que están indefectiblemente ausentes y vedados de los grandes medios de comunicación. Los Alperovich, Bussi, Goane, etc., siempre tendrán a mano un micrófono, un periodista, una cámara y dinero para extendidas campañas publicitarias. Los trabajadores, la izquierda, los que hacemos cortes contra los desalojos, los que denunciamos a los empresarios que hacen de la muerte y la explotación “su arte”, no tenemos forma de expresarnos. ¿Qué nos ofrecen los grandes medios de comunicación, además del “derecho al silencio”?
Por el contrario, de lo que se trata es de extender esta expresión artística, cultural y política para que no haya un rincón de la ciudad que quede en silencio. Queremos que las ideas y los colores irrumpan las facultades, que expresen la realidad, que dejen de ser cementerios de creatividad.
Por el contrario, de lo que se trata es de extender esta expresión artística, cultural y política para que no haya un rincón de la ciudad que quede en silencio. Queremos que las ideas y los colores irrumpan las facultades, que expresen la realidad, que dejen de ser cementerios de creatividad.
martes, 16 de octubre de 2012
Tatián, el "Libro Negro" y el mutismo "independiente"
Por Paula Schaller
En una
charla-debate organizada recientemente en la Facultad de Filosofía y
Humanidades, el decano ultra-kirchnerista Tatián, visiblemente incómodo
por las interpelaciones de Fernando Aiziczon, se despachó con un recurso más
propio del arsenal ideológico de la derecha mestrista o macrista que de los
pretendidos "nac & pop" (que, después de todo, para diferenciarse
todavía tienen que cuidar las "formas progres"): la cita al nefasto
Libro Negro del Comunismo.
Este pasquín de propaganda contrarrevolucionaria vio
la luz allá por el año 97, en plena restauración burguesa, como parte de una
operación ideológica de demonización de la Revolución Rusa que por entonces
cumplía su 80° aniversario. Lo alentaron los medios más reaccionarios de la
Francia imperialista que, cuando se empezaban a expresar las primeras
respuestas de las masas a la ofensiva burguesa (la huelga general de los
trabajadores estatales franceses en el 95, las "guerras obreras" en
Corea del Sur en el 96, el alzamiento obrero y campesino en Ecuador, las
puebladas contra el menemismo en Argentina), pretendían borrar de su
imaginación política el horizonte de la revolución recurriendo a una campaña de
"terror sensacionalista" que, lejos de todo rigor analítico,
consistió en igualar la lucha por el comunismo a una masacre sin precedentes en
la historia de la humanidad. El "comunismo" fue identificado con el
asesinato masivo de más de 100 millones de personas, más que la cantidad global
de muertos ocasionados por las dos guerras mundiales imperialistas juntas, y
transformado en una monstruosidad especular al nazismo, aunque a escala
ampliada. Una especie de versión degradada de la teoría del derechista Ernest
Nolte (con su conocida obra La guerra civil europea. 1914-1945. Bolchevismo
y nacionalsocialismo), pero llevada al paroxismo: la concepción leninista
de la revolución fue señalada como la responsable de los muertos a manos del
imperialismo yanki en las guerras de Corea y Vietnam. (!!)
Una vez más (y
van...): contra las falsificaciones históricas
Ya que Tatián
trae a colación los peores argumentos de la reacción ideológica neoliberal, nos
obliga una vez más a volver sobre tamañas falsificaciones históricas: el
stalinismo no fue la continuación del bolchevismo sino su negación
contrarrevolucionaria. Ni las matanzas stalinistas en la URSS (en las que,
pareciera necesario aclarar, fueron físicamente exterminados gran parte de los
bolcheviques de la vieja guardia y los oposicionistas -trotskystas-), ni los
regímenes de partido único y ausencia de organismos democráticos de poder
de las masas como los soviets (China, Cuba, Yugoslavia, Vietnam) fueron una
continuidad de la perspectiva leninista/trotskysta sino su negación
estratégica: aunque expropiaron a la burguesía, precisamente por no contar con
organismos de tipo soviéticos ni estar encabezados por direcciones proletarias
que impulsaran la revolución a escala internacional, estos regímenes nacieron burocratizados,
por lo que muy lejos estuvieron de implicar la liberación de las masas del
"reino de la necesidad" (y terminaron, salvo en el caso de Cuba, en
el abierto paso de la burocracia al campo de la restauración capitalista).
Hacer una igualación
entre la lucha de los explotados del mundo y los regímenes de tipo
"stalinista" que hablaron en nombre del comunismo, en el intento de
desprestigiar toda perspectiva de lucha emancipatoria, es una operación
más digna de los fukuyamas que allá por los 90 expresaban el triunfalismo
burgués con la teoría del fin de la historia, que de aquellos que hoy se
reivindican garantes del "retorno de la política" y se declaran
enemigos fervorosos de la herencia noventista.
De operaciones
ideológicas ayer y hoy
Pero todo esto
Tatián lo sabe, o al menos debería saberlo. Sucede que como intelectual
oficialista intenta defenestrar la perspectiva de la izquierda porque
tiene la complicada tarea ideológica y política de ensalzar la democracia
burguesa como único horizonte posible y convencernos de que "a la
izquierda del kirchnerismo está la pared". Algo por lo menos difícil en un
país donde, como se analiza acá existe una creciente tendencia a la emergencia política de la izquierda
trotskysta, que desde hace años viene interviniendo como actor en la lucha de
clases (Zanón y Brukman, el movimiento piquetero, la organización de sectores
clasistas dentro del llamado sindicalismo de base) y que, en particular desde el
año pasado, viene consolidándose como actor político en el escenario nacional
alrededor de la existencia del Frente de Izquierda y los Trabajadores.
Una izquierda
obrera y socialista que interpela (y combate) al kirchnerismo por izquierda,
que lo deja incómodo ante sus imposturas, acostumbrado como está a elegir más
convenientes "enemigos" (más retóricos que reales, hay que reconocer)
para el "modelo" como "Clarín", los
"ruralistas", los "monopolios", en un intento de darle algo
de "mística" a un gobierno aliado de la burocracia sindical y lo más
rancio del pejotismo que mantuvo lo esencial de la herencia noventista. Lo que
sí, sorprende que hasta en el terreno de las "formas", (en general,
el "arte" que más dominan), los intelectuales K se muestren tan poco
cuidadosos, y se despachen sin más abrevando en las más grotescas
fuentes del arsenal macartista neoliberal. En momentos de crisis
capitalista, con un gobierno que se prepara para frenar toda expectativa de los
trabajadores y las masas de obtener más conquistas mediante la lucha (y, si es necesario,
a atacar directamente), la virulencia anti-izquierda pareciera ser un discurso
más acorde a las necesidades políticas.
Mutis por el
foro
Poco se puede
decir de aquellos que deciden no decir nada. O, más bien, que en su silencio lo
dicen todo. Los compañeros de Gualicho (de la llamada izquierda independiente),
en un charla organizada por ellos mismos, decidieron ser sujetos pasivos de
todo debate político. Ni una sola palabra sobre el gobierno, ni sobre las
tareas del movimiento estudiantil, sobre el movimiento obrero, sobre cómo
organizarnos. Ni Ogando, (dirigente de La Mella), que integraba la mesa como
panelista en representación de la izquierda independiente, ni los propios
militantes de Gualicho, dijeron una sola palabra ante el debate planteado, ni
aún cuando Tatián se despachaba con barbaridades macartistas como la que
citamos arriba. Pero su silencio en un panel de debate no es casualidad, es la
expresión de su silencio de todos los días ante los principales fenómenos
políticos que atraviesan el país y la provincia, de su rotunda negativa a
organizar al movimiento estudiantil alrededor de una perspectiva que, para
ser verdaderamente de "independencia política", primero tiene que
delimitarse claramente de las variantes patronales.
Su silencio es su negativa
a posicionarse claramente frente al kirchnerismo, del que nunca dicen
nada. Resulta al menos extraño que organizaciones que nos hablan de la
"construcción del poder popular desde abajo" no tengan nada que decir
frente a un gobierno aliado de las mafias sindicales que asesinaron a Mariano
Ferreyra, que mantiene al 40 % de los trabajadores precarizados y sin derechos,
que gobierna con lo más rancio del PJ y sus señores feudales de las provincias
(como Insfrán en Formosa, responsable del asesinato de los Quom que luchaban
por sus tierras), que abarrotó de Gendarmes las barriadas pobres, y una larga
lista de etc.
Extraño
"poder popular" que pareciera pretender construirse haciendo
abstracción de los "poderes reales" que tenemos que
prepararnos para enfrentar, mostrando que a la izquierda del kirchnerismo
no hay ninguna "pared muda": somos miles, hombres y mujeres, los que
todos los días nos organizamos en facultades, fábricas, escuelas, lugares de
trabajo, barrios, con la perspectiva de construir la poderosa herramienta que
nos permita vencer.
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lunes, 6 de agosto de 2012
Mariano Ferreyra, el cinismo de Cristina y la burocracia sindical
Por Eduardo Castilla
Esta mañana empezó el
juicio a Pedraza y muchos de los implicados en el asesinato de Mariano
Ferreyra. En todo el país la izquierda y un amplio
abanico de organizaciones políticas y sociales se movilizó exigiendo la cárcel
a todos los responsables materiales e intelectuales. Como no puede ser de otra
manera, el juicio concita la atención todo el mundo. Se trata de un proceso
donde se pone el ojo sobre una de las instituciones más odiadas de este régimen
político: la podrida burocracia sindical. Para millones, Pedraza es la cara de
una casta que se enriquece a costa de la corrupción y la traición a los
intereses de los trabajadores.
Precisamente esa es la
base que permite al kirchnerismo montarse sobre la legítima demanda de justicia
para sostener la credibilidad de los aspectos progresistas de su (doble) discurso.
En el medio de las internas que golpean sobre su hegemonía política al interior del bloque dominante, estas
operaciones políticas se convierten en una línea de defensa frente a ese
desgaste.
Hoy escuchamos a CFK decir que "Los que llevamos (el aporte) a la jueza de la causa para que
pudiera comenzar el hilo de la investigación fuimos nosotros, fue Néstor
Kirchner". La reivindicación tiene su cuota de
cinismo, producto al que nos hemos acostumbrado a recibir en gran escala en
estos años. ¿Es que podía ser de otra manera? ¿Cristina está diciendo que ellos
podrían haber encubierto a los asesinos y decidieron no hacerlo? El gobierno
eligió la opción menos costosa desde el punto de vista político. Frente un brutal
y aberrante crimen, no podía reaccionar de otra forma a riesgo de romper lanzas
con sectores progresistas de las clases medias y del movimiento obrero. La
alianza estratégica del kirchnerismo con la burocracia sindical tenía (y tiene)
un límite que era imposible traspasar. Pero precisamente porque se trató de una
salida coyuntural para evitar una crisis mayor, es que no se le puede pedir
“peras al olmo”. El juicio a Pedraza es la contracara de una política que
garantiza la continuidad del conjunto de la burocracia sindical. Se podrá
debatir si es una elección abierta o la resignación ante los límites del poder propio
de la camarilla kirchnerista, pero los hechos están a la vista.
La
policía del movimiento obrero
Hace poco más de 70 años, León Trotsky señalaba
que “El capitalismo monopolista cada vez
tiene menos interés en transigir con la independencia de los sindicatos. Exige
que la burocracia reformista y la aristocracia obrera, que picotean las migajas
que caen de su mesa, se transformen en su policía política a los ojos de la
clase obrera”.
La burocracia sindical argentina cumple ese
papel de policía política desde hace casi 70 años. Su estatización bajo el
primer peronismo tuvo el objetivo de jerarquizar el control del movimiento
obrero. Por aquellos años Perón, al cual Milcíades
Peña cita, decía “Los señores que
temen tanto al sindicalismo y a la formación de grandes agrupaciones obreras
bien organizadas dirigidas y unidas, pueden desechar sus temores desde ya. Nada
hay que temer de las organizaciones. Debe temerse de las masas desorganizadas.
Estas son peligrosas (…) Sin temor a equivocarnos, podemos decir que hoy, desde
Jujuy hasta Tierra del Fuego, y desde Buenos Aires a Mendoza, se puede
orientar, dirigir y conducir a las grandes masas de trabajadores argentinos, y
cada día que pasa lo iremos haciendo en forma más perfecta, porque diariamente
se va reforzando la disciplina sindical. Sin disciplina sindical, las masas son
imposibles de manejar”
El kirchnerismo es, en ese sentido, una cabal
continuidad del peronismo. La alianza con Moyano en todos estos años fue parte
central del mecanismo de control de las calles y de freno del movimiento obrero
y el conjunto de los sectores “peligrosos”. La burocracia sindical combinó, en
estos años, contención y uso de patotas. El asesinato de Mariano Ferreyra fue
ejemplo de esto último, sin ser el único. De esta forma colaboró en preservar
las ganancias extraordinarias de la clase capitalista, aceptando los límites en
las paritarias, firmando convenios a la baja y aumentando la productividad,
aceptando la inclusión de cláusulas de polivalencia en casi la mitad de los
acuerdos firmados.
Precisamente por eso, quienes
hoy se rasgan las vestiduras por lo poco que cambió la representación sindical
en estos años, no “comprenden” (es decir, no quieren comprender o son parte del
cinismo oficial) el papel de control que jugó hacia las masas y como la
preservación de la vieja casta sindical fue necesaria para ese propósito. La
política de “renovar y democratizar” el sindicalismo es utópica porque el
kirchnerismo (y el régimen político en su conjunto) no pueden prescindir de
este mecanismo de control de la clase trabajadora. Más aún, en un momento en
que empieza a golpear mucho más abiertamente la crisis internacional.
El rol estratégico de la burocracia
sindical en la historia nacional tiene su antecedente más cercano en las
jornadas revolucionarias de diciembre del 2001, cuando fue el freno para la entrada
en la escena del movimiento obrero para enfrentar a De la Rúa. Si marchamos aún
más atrás en el tiempo, veremos ese mismo papel atando a la clase obrera al
Pacto Social bajo el gobierno de Perón, mientas integraba la Triple A para
reventar a la extendida vanguardia antiburocrática existente entre los
trabajadores y la juventud.
Demagogia
y “poder real”
Precisamente por todo esto, es imposible que
el gobierno avance en romper lanzas con el conjunto de la burocracia sindical. Si
el tiro
que mató a Mariano pasó muy cerca del corazón de Néstor, el dedo que apretó el
gatillo bien podría estar muy cerca de las manos de Cristina. Si Pedraza no
estuviera preso, no habría ningún problema en que se sentara en la misma mesa de burócratas aliados a
CFK. No habrá “renovación sindical” por el sencillo motivo de que, detrás de
los discursos floridos, está la fuerza material de esa burocracia, uno de los poderes reales en los cuales se apoya
la dominación capitalista.
Si la “disciplina sindical” no se pudo extender más en estos años, fue
producto de las transformaciones del movimiento obrero argentino post dictadura
y bajo el menemismo. En primer lugar, con la enorme
división al interior de sus filas. Según señala este estudio “persiste una importante cantidad de
trabajadores asalariados no registrados, que pasaron del 48,9% en el cuarto trimestre
de 2004 al 34,2% en el mismo período de 2011, situación que plantea un límite a
la cobertura de los acuerdos y convenios colectivos de trabajo”. Esta fue una de las
grandes “conquistas” de la burguesía en los 90, que se ampliaron bajo la década
del período de pos-convertibilidad, siendo la raíz de las ganancias
extraordinarias de la clase capitalista. Como se explica en esta entrevista, la clave del
ataque que mató a Mariano estuvo en garantizar el fenomenal negocio de las
tercerizaciones, extendido en el conjunto del movimiento obrero. Precisamente
porque esa es una de claves de las altas ganancias capitalistas de la última
década, es que el juicio contra Pedraza debe ser el límite. El viejo aliado,
representante de un modelo sindical “ejemplar” al decir de CFK, es la cabeza
que debe ser sacrificada para dejar todo igual.
De ahí que la
justa pelea por la cárcel a Pedraza y todos los responsables materiales e intelectuales
del crimen, tiene que ser parte de una estrategia para vencer al conjunto de la
clase capitalista, luchando para revertir las derrotas que ésta impuso, por
unir al conjunto de la clase trabajadora. En este camino, una dimensión central
de esa tarea es la de echar a la burocracia de los sindicatos y transformarlos
en organizaciones democráticas de lucha que organicen al conjunto de los trabajadores.
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miércoles, 23 de mayo de 2012
Tercer programa de Giro a la Izquierda
Hacer click en la imagen para ver el programa. Para bajar la música del blog, abajo y la derecha, como siempre.
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