lunes, 30 de julio de 2012

La Voz del Interior: órgano oficial de patrones, oligarcas y represores

Por Eduardo Castilla

No queríamos terminar este domingo sin escribir algunas líneas sobre la política del principal medio de comunicación gráfico que tiene la provincia. Nadie ignora que La Voz del Interior es parte central del régimen político de Córdoba y por lo tanto, nadie puede buscar neutralidad en sus páginas. Si hace unos días escribimos que De la Sota logró encolumnar a la Voz en su campaña en reclamo de los fondos a la nación, este domingo vimos como el diario más leído de la provincia se convirtió en el vocero de  otros grandes objetivos del gobierno provincial.

Relegitimando a los asesinos de la juventud trabajadora

La Voz de este domingo dedica su contratapa a una nota que lleva sugestivo título de  Se agrega la hipótesis de una sobredosis donde la hipótesis central que se desarrolla es la desaparición de Facundo Rivera Alegre por un ajuste de cuentas entre narcos. Lo que nadie puede contestar es porque este supuesto ajuste haría desaparecer el cuerpo. Como bien señala la madre de Facundo “la lógica de los traficantes por lo general es la opuesta. Antes que ocultar, si matan a alguien, buscan que se sepa, para aleccionar al resto”
Las “pistas” de los “investigadores” se alejan cada vez más de lo que la madre y sus amigos vienen denunciando, que es la responsabilidad policial. A esa denuncia y la consecuente pelea venimos apoyando algunos organismos de DDHH y partidos de izquierda ¿Cómo es posible que Facundo haya sido golpeado según denunciaron unas jóvenes en un lugar del centro donde justamente no hay cobertura de las cámaras de seguridad? ¿Cómo puede desaparecer el cuerpo sin encontrarse ni una sola pista seria hace meses?  
La Voz viene a intentar evitar el desgaste de esta institución que se halla acusada de un sinnúmero de abusos permanentes. Hace pocos días, la juventud de la localidad de La Falda se rebeló contra la policía de ese lugar por los constantes abusos que sufren. El detonante fue la aparición del cuerpo sin vida de un joven que había estado detenido algunas horas antes. Hoy se vive un virtual estado de sitio en esa localidad. Los jóvenes no pueden salir de sus casas por la persecución abierta de la Policía.
Hace unos meses escribimos sobre los abusos policiales que “Su importancia en tanto órgano de represión al servicio del capital es sintomática de los elementos bonapartistas del régimen provincial. Pero esta situación abre brechas y contradicciones de distinto tipo. Sin ser una fuerza que “impone agenda” como lo hizo (y lo hace) la Bonaerense, la policía de Córdoba tiene una cierta autonomía pero, por sobre todo, está “subida al caballo” por su rol en el esquema de gobierno provincial. Tanta prepotencia por parte de los policías individuales, expresada en la enorme cantidad de denuncias por golpizas hacia jóvenes esencialmente, se desprende de que tienen “rienda suelta” bajo el delasotismo. Este es otro de los elementos que “hacen ruido” en el régimen provincial.”
Por ese entonces La Voz insinuaba una política de reformas que sacara las “manzanas podridas” para mejorar la imagen de la fuerza. Pero el giro de las últimas semanas de De la Sota, con su discurso abierto contra la juventud y las libertades democráticas, junto a las llamadas leyes de trata y contra el narcotráfico, le dieron a esta institución mayor poder de fuego y un espaldarazo. En ese marco, La Voz aporta a moderar su desprestigio para garantizar una policía más o menos bien vista cuando hay que “imponer orden”.

El “estado inviable”

En su función de órgano ideológico del régimen político provincial, La Voz a su vez, habla por las grandes patronales. A tono con las necesidades de monopolios y oligarquía sojera, este domingo Julio Perotti escribe “los dirigentes de Córdoba saben en forma sobrada que, más allá de sus tiroteos y romances con la Nación, el sistema previsional debe dejar de ser un barril sin fondo. No hacerlo es empobrecer al Estado hasta hacerlo inviable”.
Resultaría sorprendente, sino fuera una confirmación de los intereses detrás de La Voz del Interior. ¿Acaso no le resulten “empobrecedores” del estado provincial los millones que el mismo regala en subsidios y exenciones impositivas a las multinacionales? ¿Y los bajos impuestos que se perciben entre las patronales del campo? ¿No son empobrecedores del estado provincial las decenas de miles de pesos que cobra cada uno de los miles de funcionarios del aparato estatal en conceptos de todo tipo?  
Para La Voz el estado se puede tornar “inviable” si sostiene las jubilaciones de quienes aportaron con su trabajo toda la vida en el terreno de la salud, la educación, la construcción y los servicios en esta provincia. No hace falta decir que se trata de una clara ubicación al servicio de este estado provincial que se mantiene como garante de los negocios de las multinacionales y las grandes patronales ligadas a los negocios del campo.
Precisamente para hacer que los trabajadores estatales acepten el “estado viable” es que La Voz presenta las hipótesis de investigación que lavan de culpas a la policía. Las páginas del centenario matutino limpian los cañones de cada pistola que apunta potencialmente hacia los trabajadores.
Ya es un decir que no hay periodismo independiente. Pero en esa formulación no están planteados los intereses sociales y económicos profundos que se esconden detrás de las variantes periodísticas. Precisamente la ausencia de independencia radica en la subordinación a los intereses de diversas fracciones de grupos capitalistas. La Voz es la vocera, valga la redundancia, de la provincia gobernada por las multinacionales automotrices y las patronales del campo, con su personal político de los De la Sota, los Schiaretti, los Juez, los Mestre y demás.
Hace falta avanzar en poner de pie la voz de las decenas de miles de trabajadores de esa industria automotriz, de los miles de la rama alimenticia, del poderoso sector de la clase obrera de los servicios, como los choferes de la UTA y los trabajadores de EPEC. Pero también de las decenas de miles que están por fuera de los sindicatos, hoy dirigidos por una casta alineada abiertamente con el gobierno provincial y las patronales, de los miles que trabajan en condiciones esclavas en ese campo cordobés que tanto festeja De la Sota, de los miles que trabajan, sufren accidentes y mueren en las obras de construcción, de aquellos que duermen en los clandestinos talleres de ropa que se hace para marcas importantes de Córdoba. Aportando a esa voz damos pasos con Giro a la Izquierda. Aún es un pequeño grano de arena, pero la tormenta del desierto ya empieza a soplar.

sábado, 21 de julio de 2012

Córdoba: Entre la derechización del gobierno y las tensiones latentes



Por Joaquín Ramírez yEduardo Castilla

En Córdoba y, en cierta medida, en todo el país, una noticia de estos días es el giro político y discursivo de De la Sota hacia la derecha en el plano local, así como su proyección a nivel nacional, con un discurso diferenciado del gobierno de CFK.
Luego de la pelea entre Cristina y Scioli, que terminó (por ahora) en un cierto desgaste mutuo, el Gallego se lanza a la escena nacional para tratar de ubicarse como polo de atracción de los sectores díscolos en el peronismo, con una importante imagen de fortaleza interna. Esto tiene expresión en que De la Sota logró alinear al régimen político cordobés detrás de sí, en la pelea "federal" por los fondos de la Caja, incluida desde ya La Voz del Interior, parte fundamental en cualquier campaña política de la provincia.

La Córdoba reaccionaria al poder

De la Sota ganó las elecciones del 2011 con un peso enorme de los votos del interior provincial. Un voto sojero dentro de un amplio conservadurismo, como lo definimos en ese momento. El mismo se basaba en que el conjunto de la situación económica seguía siendo favorable a pesar de los primeros coletazos de la crisis.
Desde ese momento a esta parte, se expresaron más agudamente los golpes de la crisis internacional, con el freno de las ventas a Brasil a partir del segundo cuatrimestre del 2011, lo que repercutió en suspensiones, despidos hormigas y presentación de preventivos de crisis en la industria metalmecánica. Parte de la crisis se expresó en un descenso del crecimiento de la recaudación provincial durante los primeros meses del 2012, lo que generó atrasos en el pago a proveedores y tensó la negociación con el gobierno nacional.
En esta situación, la superestructura política cordobesa aparecía marcada por el binomio derechista Mestre-De la Sota, lo que no se correspondía con la relación de fuerzas más general imperante en la provincia. En ese marco, en los últimos meses habíamos visto toda una serie de medidas demagógicas por parte del gobierno, sobre las que dijimos que tienen el objetivo de recomponer parte del desprestigio estructural que tiene el régimen. Éste, a diferencia del delasotismo del primer gobierno, no se sostiene sobre derrotas de las masas, sino sobre el conservadurismo social que impusieron años de crecimiento económico que están llegando a su fin”.  
Ese “giro progresista” tuvo corta vida y se hizo bajo las insignias de la derecha más reaccionaria. En cada una de esas medidas se vio la larga sombra delatosista. La famosa “ley contra la trata” terminó siendo una herramienta para darle más poder de fuego a la policía y legalizar la persecución a quienes están en situación de prostitución. La llamada ley “contra el narcotráfico” cumple el mismo papel como denuncia Laura Vilches aquí, atacando abiertamente a la juventud. Los subsidios a los ex detenidos fueron ultra-retaceados, “es lo que podemos dar” dijo el legislador Alessandri en ese momento, mostrando el desprecio total del gobierno por quienes fueron secuestrados y torturados.
Pero en estos días, se produjo una vuelta clara hacia la derecha con este discurso, donde se lanzó abiertamente contra la juventud y contra quienes peleamos por la legalización de la droga. También se lanzó contra la libre elección sexual de la juventud y contra conquistas parciales logradas bajo el kirchnerismo como la Ley de Identidad de género. Lo hizo reivindicando una tradición conservadora de la familia, de padres golpeadores, como el suyo. Así De la Sota volvió a mostrar quien en definitiva es. Si hace poco más de 8 años había dicho que “las madres debieron haber  cuidado mejor a sus hijos” en la época de la dictadura, nuevamente enarbola un discurso de defensa de la familia, reivindicando la figura del padre rector que imprime la personalidad al hijo, al punto tal de anular su libre decisión.

¿Un nuevo clima en Córdoba?

Esa ofensiva pseudo-ideológica, populista de derecha, apunta a crear un clima social reaccionario, que tenga por función evitar cualquier tipo de disidencia al interior de la provincia. No es un desatino ni un exabrupto. Es parte de un plan político con el que lanzarse al ruedo político nacional, garantizando orden en casa. En la misma tónica, acá se dice que “el plan de De la Sota se completa con marcar diferencias con el progresismo K. Y para ello apela al conservadurismo, donde el gobernador se siente más que a gusto”
Pero no se trata sólo una diferenciación política con el kirchnerismo, sino que es parte del perfil constituyente de un peronismo claramente de derecha, reaccionario en lo social y cultural, abiertamente pro-patronal y anti-obrero. No por nada el Gallego está acusado de haber sido parte de los comandos civiles del Navarrazo. Se propone como garante del orden, en tanto figura fuerte del régimen, culturalmente reaccionario, al mejor estilo Perón.
Además De la Sota expresa los intereses de sectores de la Córdoba conservadora, que en estos años se fortalecieron al calor de los altos precios de la soja. Proceso que se expresó en el crecimiento arrollador de los negociados inmobiliarios y la especulación en esta rama. El Gallego estuvo junto a las patronales sojeras en el 2008, algo que no resulta extraño en el marco de que una fracción importante de su base social está en el interior rural. Pero no fue el único, sino que todo el arco político provincial estuvo en la misma trinchera (a la que lamentablemente se sumó una franja de la izquierda). Esto demuestra el enorme peso social que tiene la producción agrícola y en particular el complejo sojero en la provincia.
A la producción a gran escala del poroto, del cual Córdoba es la segunda productora nacional, se proponen ahora, sumarle un plus de “industrialización”, que le dé “valor agregado” a la producción agrícola, profundizando un esquema de acumulación capitalista con fuerte peso en el campo. Así, la instalación de Monsanto y otras inversiones en Córdoba son el adelanto de lo que será la Argentina dentro de 10 a 15 años, con una estructura productiva competitiva montada en eslabones más uniformes, en la agregación de valor en las diferentes cadenas. Para decirlo de manera más simple: más granos, pero también más carnes, lácteos, biocombustibles y sus respectivas plataformas industriales” (ver acá)        

Una pausa en el impacto de la crisis

A las bondades del poroto, que viene obteniendo precios records, permitiendo una continuidad relativa de la situación económica anterior, se suman otras “buenas noticias” para Córdoba. Por un lado, como plantean algunos análisis, los planes de reactivación del consumo en Brasil, parecen estar dando resultados, lo que puede permitir una recuperación parcial de la industria automotriz cordobesa, fuertemente dependiente del país vecino.
Junto a esto, el gobierno provincial logró sortear, por el momento, una situación de crisis de la Caja de Jubilaciones y de las finanzas provinciales, a través de la colocación de más de U$D 100 millones en títulos que le permitieron financiarse y de las mejoras en la recaudación provincial propia en el primer semestre. Así, se evitó tener que pasar por la batalla que tuvo que afrontar Scioli.
Una de las claves es que De la Sota logró, montado en esta situación de la economía (que por cierto no comparte la mayoría de las provincias) y con su pedido por los fondos de la Caja, alinear a casi el conjunto del régimen político provincial detrás del reclamo federalista dejando a la defensiva al débil kirchnerismo provincial que no “defiende los intereses de Córdoba”. Este aspecto del relato busca crear un sentido común fuerte que justifique que cualquier ajuste que tenga que hacer, será culpa de CFK que no envía los fondos.
Sin embargo, por el momento, la política es no generar ningún foco de conflicto que perturbe la Córdoba “modelo” que presenta al país. Ese sentido común en lo político es el que va acompañado de la derechización social que lleva a la estigmatización y represión de la juventud, para mostrar una Córdoba en orden, donde no hay lugar para consignas subversivas como la “legalización de la marihuana” y el “sobran policías”.

Puntos de falla y tensiones latentes

Ante la presentación de tanta fortaleza, ¿cuáles son los puntos de falla del gobierno y el régimen cordobés?
En primer lugar, la puesta en escena de la epopeya por los fondos de la Caja, no puede evitar que realmente el ahogamiento financiero al que quiere someter CFK a todos los que se presenten como presidenciables, surta efecto. Esto puede implicar, en el mediano plazo, que las arcas no alcancen para mantener el esquema de equilibrios entre subsidios a las multinacionales, populismo de la miseria (PPP), la infraestructura provincial y el pago a término de la plantilla estatal, docente y de trabajadores de la salud.
Entre las prioridades de financiamiento ya trazó los ejes centrales en el desarrollo de la autovía Córdoba-Río Cuarto y otras rutas de la provincia, siguiendo con su campaña de obras al servicio de los negocios capitalistas y donde, ni por casualidad, se le cruza una escuela de esas que se caen a pedazos en cualquier punto de la provincia. Esos problemas estructurales en la capital, ya significaron un gran proceso de lucha estudiantil en el 2010.
Entre las cuestiones de infraestructura no es menor esto último ya que vimos como el conflicto en un colegio prendió como pólvora por toda la ciudad, desde franjas de las clases medias a los sectores sociales carenciados. Un conflicto con tomas de colegios, que culminó en un escándalo nacional, como fue un represión televisada para todo el país que permitió a los K golpear al gobierno provincial, escenario que jamás quisiera enfrentar De la Sota.
Pero en ese  proceso estudiantil también estuvo presente una reacción al clima de represión que vive la juventud y por eso no se puede descartar un proceso similar, ante la derechización del gobierno. Aquí radica un segundo posible punto de falla, estrechamente ligado al anterior. La posibilidad de la emergencia de demandas democráticas entre la juventud que cuestionen este giro político y sus consecuencias sociales, culturales y legales. La movilización del pasado jueves 19 de julio contra la radicación de la multinacional Monsanto puede estar anunciando tendencias a  resistir la imposición que De la Sota quiere hacer de la Córdoba sojera.
Pero además, la juventud trabajadora y plebeya de Córdoba sufre todo tipo de atropellos y humillaciones, con la policía provincial persiguiéndola todo el tiempo, con la precarización laboral extrema a la que está sometida, con los ataques verbales del mismo De la Sota. En ese marco, medidas como el PPP actúan contrapesando ese agobio social, pero de manera  enormemente limitada.
Un tercer punto y tal vez el más profundo, pero que hoy aparece relativamente amortiguado, es la contradicción entre este régimen de conjunto y el movimiento obrero, en el marco del impacto de la crisis capitalista internacional. Ante esta contradicción, escribimos que Con Dragún como ministro de trabajo de la provincia, se intentaba montar un “Pacto social” en el gobierno, para ponerle freno a los reclamos. Colocando a los dirigentes sindicales en puestos clave, el gobierno esperaba poder contener al movimiento obrero y evitar el desarrollo de tendencias más combativas”.
Esta contradicción que por el momento parece haber amenguando, es una brecha estructural en el régimen político. Frente a la creciente derechización del gobierno y con las consecuencias de la crisis internacional golpeando paulatinamente sobre el país, se abre la perspectiva de mayores choques y conflictos, para lo cual la ubicación abiertamente oficialista de una fracción importante de la burocracia sindical, puede ser un obstáculo al inicio, pero ayudar a una experiencia más veloz en el curso de las luchas, como se vio en los pocos pero intensos conflictos que se dieron en el primer semestre del año.  
Podemos decir que la fortaleza de tener conducciones gremiales directamente cooptadas puede significar también la debilidad de que, ante tamaña subordinación, estas pierdan rápidamente crédito y emerjan oposiciones en sus gremios capaces de disputar el poder, sea por elecciones o en luchas mismas. Esta contradicción es, aunque latente, particularmente aguda en la industria automotriz donde si bien como deciamos antes, influyen las ventas a Brasil por el momento, la situación no es de derrota obrera como mostro la acción del cuerpo de delegados de VW independiente de la burocracia y la integración al gobierno de la conducción de SMATA la ata de manos para ponerse a la cabeza de los reclamos.
En este marco de la intervención activa se sectores de trabajadores y la juventud que se preparen para la perspectiva de choques abiertos contra este gobierno, ayudando a procesar tanto la experiencia política con el gobierno nacional como con el delasotismo y la burocracia, es un elemento esencial para pelear por evitar que las crisis que potencialmente puedan abrirse, terminen en derrotas o sean llevadas a los pies de sectores de la oposición patronal.

jueves, 19 de julio de 2012

CONTRA LA EMPRESA QUE FABRICA MUERTE


Declaración de la Juventud del PTS de Barrio Arenales y del Colegio Jerónimo Luis de Cabrera (el Jero)


1 millón de razones para luchar contra Monsanto, la empresa que envenena el mundo


Monsanto fue una de las compañías que fabricó el Agente Naranja, sustancia que se utilizó en Vietnam desde 1962 hasta 1970, como arma química causando 400 mil muertos, otro medio millón afectado, aun hoy persiste en el ambiente y causa la muerte de los vietnamitas.
Es la misma empresa que fabricó PCB, y ocultó durante 50 años que ese aceite era cancerígeno, para "no perder ni un dólar" según sus propios documentos. En Argentina todavía y a pesar de ser cancerígeno se lo utiliza como aceite refrigerante de los transformadores en los barrios.
Hoy quien dice semilla, dice Monsanto, pero también dice alimentos...Esta empresa norteamericana maneja el mercado mundial de la soja. Es la productora y dueña de las patentes del 90% de los transgénicos producidos en el mundo. Es la empresa que produce el herbicida cancerígeno RoundUp (que contiene glisfofato), que se queda en el suelo y se filtra hasta las napas de agua, contaminando los arroyos y ríos fuente de agua potable de la mayoría de la ciudades, el único vegetal que resiste el veneno de este herbicida son las semillas de soja transgénicas, semillas genéticamente modificadas precisamente por Monsanto.
Esta gran corporación, además, es denunciada por numerosos periodistas paraguayos como la impulsora del golpe contra Lugo, como política de entrega del suelo a las transnacionales del agro, y la persecución a los campesinos y pueblos originarios que resisten el saqueo de sus tierras.

Cristina y De la Sota siembran la muerte con Monsanto

En la Argentina existen 16 millones de hectáreas (la mitad de las tierras cultivables del país) plantadas con soja transgénica, sin siquiera saber cuáles son las consecuencias para la salud humana de la manipulación genética de la semilla de soja. Los grandes pooles de siembras, como Monsanto, continúan comprando y arrendando tierras, talando bosques nativos como en Santiago del Estero, Formosa, Salta y Córdoba.Las grandes patronales sojeras responsables de desalojos de campesinos pobres en muchas provincias e incluso de asesinatos como el de Cristian Ferreyra en Santiago del Estero, son parte de este enorme negocio junto a Monsanto.A pesar de su prontuario de envenenamiento y muerte en el mundo, los productos de fumigación de Monsanto siguen causando cáncer y muerte como sucedió en el barrio Ituzaingó. Mientas los habitantes del barrio logran evitar que sigan fumigando tóxicos, Cristina y De La Sota reciben a Monsanto con los brazos abiertos, dejando a merced de este monopolio asesino a cientos de familias de Malvinas argentinas, para que continué su brutal negocio en el boom sojero, con una inversión de 1.600 millones de pesos para construir la planta "más importante para América Latina" de producción de semillas alteradas genéticamente.Mientras el gobierno de Cristina posa de antiimperialista en su discurso, en la práctica permite que el veneno de Monsanto corra por nuestra tierra, agua y alimento demostrando la sumisión de su gobierno al imperialismo y sus negocios. 
Desde la Juventud del PTS nos venimos organizando en los colegios, en el trabajo y centro vecinales del barrio Arenales para no permitir que esta multinacional imperialista nos explote, nos envenene y nos mate, para llevarse millones de dólares del negocio del agro.
Es necesario que los jóvenes estudiantes secundarios y universitarios nos movilicemos ampliamente, organizándonos en los cada escuela y facultad para impedir que se instale esta fábrica de la muerte. Somos miles los que queremos impedir que este monopolio imperialista, con el apoyo de los gobiernos nacional y provincial nos siga asesinando

·         -Basta de envenenamiento al pueblo trabajador.
·         -Fuera Monsanto y las multinacionales imperialistas de América latina.               
·         -Este jueves marchamos con las madres de Ituzaingó desde las 18hs en Colon y Cañada.     

           Juventud del PTS en Arenales-Juventud del PTS en el Jero