viernes, 16 de agosto de 2013

El "crimen" del arte callejero en EEUU (ante el asesinato de Israel Hernández)




Romina Montiel, 
integrante de Musa de Oktubre

"El arte que expresa la parte más sensible de la cultura, la pasión de jugar, de conocer y descubrir, de divertir y cuestionar nuestra vida, será golpeado junto a nuestros pueblos sobre quienes caerán los costos de la crisis..." 
Manifiesto de Contraimagen, 2008, comienzos de la crisis.

"El arte no es un crimen" se leía en una de las pancartas entre la muchedumbre frente a un local de McDonalds abandonado en las afueras de Miami. Hace una semana sus paredes habían sido un lienzo para los  trazos de  Israel Hernández, artista del graffiti e inmigrante colombiano de 18 años.  La "R", primera letra de su nombre artístico "Reefa", resiste escrita evocando la fatalidad de lo inconcluso. El punto final prematuro vino como un rayo, literalmente: para detener su "peligrosa" pintada, la fiera policía de Miami Beach -famosa por los  casos irresueltos de gatillo fácil contra jóvenes, en su gran mayoría de sectores inmigrantes, negros y pobres- asesinó a Israel con "Taser", un arma de descargas eléctricas. Los oficiales hasta se hicieron tiempo de reír y felicitarse su "heroica proeza" de protección a la propiedad privada antes de llamar a la ambulancia. Pero "Reefa" había muerto en el acto, fulminado. Su crimen: querer expresarse sobre la pared ajena, eso sí, repleta de afiches con las sonrisas de políticos demócratas y republicanos (ellos también ríen). A los costados del trazo escuálido de Reefa presumen enormes carteles, con todo el permiso y la custodia policial que el dinero puede comprar. Por doquier, coloridos letreros publicitarios de empresas colmando el "espacio público", el "de  todos".  
Pero pasa que Israel era "un nadie" en un país donde para el estado "todos" son cada vez más adinerados, blancos, cristianos y derechos.  Ante la crisis económica que tambalea a la potencia norteamericana, el estado de derechos,  la democracia y "lo público" se encojen, y expulsan a cada vez más "nadies". Como Israel, como Trayvon Martin, un joven negro asesinado por un guardia colaborador de la policía que quedó absuelto; como los millones de pobres que pueblan las cárceles, las otras miles de víctimas de brutalidad policial creciente, los nadies perseguidos y víctimas de la xenofobia y el racismo hechos carne en la cultura blanca norteamericana; los que perdieron todo y hoy pueblan las ciudades carpa y las ciudades bajo-puente mientras el gobierno salva a los bancos usureros; los que habitan los altos índices de desempleo que no baja, signo estructural de que la crisis seguirá golpeando a pesar de los recientes augurios de recuperación.
La historia de Israel se hermana a la de muchos que, perseguidos o censurados, debieron grabar en paredes clandestinamente su arte o sus mensajes de denuncia contra el régimen oficial. Desde los símbolos de los primeros cristianos perseguidos en las catacumbas del imperio romano, a los orígenes del graffiti propiamente dicho como cara gráfica de una cultura de la resistencia entre los sectores latinos y negros plebeyos excluidos de New York a fines de los  '60, a la par que, paradójicamente, Estados Unidos se convertía en el nuevo centro del mercado cultural mundial.  Hoy los recortes del gobierno de Obama acrecientan las desigualdades sociales y empuja a millones a cuestionar ese modelo político y económico y a la casta del "1% que lo sostiene contra los intereses del 99%".
La ecuación es la misma en el terreno del arte: mientras en Miami se asesina a los jóvenes que tienen que revolver en los escombros para encontrar superficies para hacer su arte, se ponen en marcha los preparativos para "Art Basel", una de las principales ferias comerciales de arte del mundo que mueve millones de dólares en el mercado del arte y del turismo. 
Los embates de los gobiernos, que al calor de la crisis muestran su verdadera faz al completo servicio de salvar a los capitalistas, afectan hasta lo más íntimo de la vida de los sectores populares y trabajadores. La amenaza de desempleo, hambre, y el aumento de las hora de explotación teniendo que entregar hasta el último aliento de cada día a la ganancia del patrón hace imposible tener tiempo de ocio y disfrute para crear y desarrollar las capacidades más elevadas del arte y la cultura.
Los artistas y trabajadores de la cultura que trabajamos o militamos para expandir la experiencia del arte por fuera del circulo de los privilegiados, debemos ponernos a tono con los tiempos que corren, y desbordar con nuestras prácticas y obras el cada vez más reducido espacio del arte de "resistencia" que nos “permiten” ocupar.  Debemos pasar la ofensiva, ligándonos con nuestras obras y en la calle a los que se organizan y luchan para que no haya más chicos como Trayvon e Israel asesinados, contra los ajustes y ataques ante la crisis.  Junto a los jóvenes del "Occupy wall street" en USA, los "indignados" europeos, los "Yo soy 132" mexicanos, los jóvenes brasileros, los estudiantes que pelean por educación gratuita como en Chile. Y sobre todo a la clase obrera que ya estira sus músculos y sale a luchar en todo el mundo luego de décadas, demostrando nuevamente que tiene la fuerza para acabar con este sistema de explotación donde "hacer y disfrutar arte" es una especialidad de unos pocos mientras para la mayoría es algo desconocido, o una actividad hecha con muchos esfuerzo en las horas robadas al sueño después del trabajo.
Como decía Trotsky, "el arte y la cultura forman otro frente de lucha, escritores y artistas son sus soldados". El asesinato de Israel generó que muchos jóvenes en distintos puntos de la ciudad se movilicen y lleven adelante campañas de pintadas, graffitis y murales para denunciar la brutalidad policial. Hasta se vieron expresiones de solidaridad y murales en otras ciudades del mundo. Desde argentina nos sumamos para continuar la "R" que dejo inconclusa Reefa con una palabra, "Revolución", hacia una sociedad sin paredes privadas ni policías que las defiendan...
Israel Hernández, "Reefa", Trayvon Martin, presentes!

2 comentarios:

  1. Muchas gracias por reivindicar los sentimientos de miles en esta reflexion y homenaje a artistas populares como Hernandez y Martin asesinados en actos lamentables que no hacen sino confirmar la barbarie capitalista. Estos hechos confirman que avanzamos por el camino correcto, terminar con la violencia, desarmar al asesino, destruir el sistema que lo alimenta, multiplicando en cada mártir el numero y calidad de militantes.

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  2. Gracias por Denunciar actos de exceso de fuerza de las autoridades de la Florida , para ser más exactos de Miami Hoy han traído dolor a una familia... Pero creemos en la Justicia Divina.... Israel era un ser sensible al arte .. un ser hermoso y respetuoso un ser noble ... Siempre lo recordaremos.. es por eso que mañana 6 de Octubre que se cumplen dos meses y no sucede nada no ha sucedido nada y es la misma policía la que se está investigando.. osea que transparencia puede existir en esa investigación..... Mañana 6 de Octubre nos levantaremos a una sola voz en Miami florida en la Marcha, En Colombia Barranquilla, Cartagena y Maicao a una sola voz estaremos gritando JUSTICIA POR ISRAEL

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